Ingresos pasivos: el gran objetivo del bloguero
¿Quién no ha oído hablar de los ingresos pasivos? Ese término utilizado en el mundillo de ganar dinero por Internet y los negocios online y que en muchas ocasiones, es malinterpretado por los “novatos” que empiezan a abrirse camino en esta jungla digital donde la competencia y las dificultades aumentan cada día.
Y es que la propia palabra incita a pensar en algo que realmente no es: pasivo = sin trabajo. ¡Juassssss! ¡Nada más lejos de la realidad! El trabajo que uno debe realizar para conseguir los ansiados ingresos pasivos puede ser descomunal y en muchas ocasiones, totalmente infructuoso.
Miles de personas lo intentan cada día y pocos son los que lo consiguen, así que no creas que a las primeras de cambio vas a estar viendo como tu cuenta corriente sube como la espuma mientras estás tumbado en la playa bebiendo mojitos y con cuerpos esculturales a tu alrededor
¿Qué son los ingresos pasivos?
Los ingresos pasivos (también conocidos como ingresos residuales), podríamos definirlos como aquellos ingresos o ganancias que podemos obtener sin estar trabajando activamente en nada en concreto en un período de tiempo determinado.
Para que lo entendáis mejor, los ingresos pasivos son justo lo contrario que los ingresos activos, que son aquellos que conseguimos a través de nuestro trabajo diario, sin el cual, dejaríamos de recibir de forma inmediata. Por ejemplo, ¿qué pasa cuando perdemos el empleo? Efectivamente, que nos quedamos sin sueldo
Del mismo modo, si eres un freelancer y/o autónomo que cobra cada vez que realiza o entrega un trabajo, es evidente que la remuneración económica siempre estará sujeta a la realización del mismo. Es posible que tengas más flexibilidad que un trabajador por cuenta ajena, pero igualmente no cobrarás hasta que realices tu trabajo.
El objetivo de los ingresos pasivos es justo todo lo contrario. Se trata de realizar un trabajo o inversión que perdure en el tiempo y nos permita generar ingresos después de haberlo hecho sin tener que volverlo a realizar.
Esto no significa que los ingresos pasivos se conviertan automáticamente en permanentes. ¡Ojalá!. Algunas formas de ingresos pueden durar años e incluso décadas, pero también puede ocurrir que tan sólo duren unos pocos meses.
Ejemplos de ingresos pasivos
Algunos ejemplos de ingresos pasivos tradicionales son los obtenidos a través de las inversiones inmobiliarias o la adquisición de acciones bursátiles. Son los métodos “de toda la vida” y por supuesto siguen funcionando (a veces mejor y otras peor).
El modus operandi es sencillo: se invierte o realiza un trabajo esperando que te permita generar ingresos a largo plazo y si es posible, de por vida. Un ejemplo muy común lo encontramos en la gente que compra locales comerciales y luego simplemente se dedica a alquilarlos.
Conozco a varias personas que viven exclusivamente de eso. En su día tenían unos ahorros y se dedicaron a invertir en pequeños bajos y locales que a día de hoy les reportan pingües beneficios. Hicieron un esfuerzo una sola vez y a día de hoy viven de ello sin pegar ni golpe
Otro ejemplo muy común de ingresos pasivos lo tenemos en lo que consiguen algunos escritores con sus libros. ¿Cuánto tardó J.K. Rowling en escribir Harry Potter? Seguro que fueron unos cuantos años de duro trabajo para pensar, crear y escribir la famosa saga fantástica apta para pequeños y mayores.
Pero, ¿y ahora? La famosa escritora británica podría tirarse toda la vida sin mover ni un dedo y viviendo de los ingresos pasivos que le proporcionan sus famosos libros. No tendría que volver a trabajar en su vida si ella quisiera.
Sobra decir que esto es un ejemplo totalmente extremo, pero creo que sirve de maravilla para entender el concepto
Al igual que en el “mundo real”, las posibilidades de conseguir ingresos pasivos en línea también son variadas. Ejemplos de ello lo tenemos en la venta de libros electrónicos e infoproductos, la creación y posicionamiento de páginas web y la comercialización de cursos online.
Más adelante nos centraremos en ello.
Aspectos a tener en cuenta
El gran objetivo de toda persona que busca la obtención de un ingreso pasivo, es conseguir que el fruto de su trabajo se vea recompensado de forma permanente en el tiempo sin tener que volverlo a realizar. Esto suena muy bonito pero no siempre es posible.
Los ingresos pasivos no son siempre permanentes. Algunas formas de ingresos pasivos pueden durar unos pocos meses o años. Otras formas pueden continuar durante décadas o incluso siglos a través de múltiples generaciones. Sin embargo, todas las formas de ingresos tarde o temprano se “secan” por una razón u otra.
Un ingreso pasivo no significa tener un “ingreso seguro”. Evidentemente, algunas formas de ingresos pasivos son más seguras que otras, pero siempre hay algún elemento de riesgo en todas ellas. Por ello, lo más aconsejable es diversificar en diferentes fuentes de ingresos.
Si por alguna razón alguna de ellas “muriera”, tendremos a los otras trabajando para nosotros. Es el mismo concepto que se utiliza para hacer inversiones de forma correcta y que ya hemos comentado en infinidad de ocasiones. Recordad: mayor diversificación = menor riesgo.
Los ingresos pasivos no son siempre 100% pasivos (valga la redundancia). En mayor o menor medida, todos los ingresos necesitan de un mantenimiento. Por ejemplo, puedes tener un blog con miles de visitas que te proporciona ingresos pasivos gracias a un artículo bien posicionado y monetizado con Adsense.
Pero de vez en cuando, tendrás que comprobar si el hosting funciona bien, si ese artículo sigue bien posicionado, si estás perdiendo o ganando visitas, si tu competencia te está haciendo alguna trastada, etcétera.
Es fundamental controlar regularmente el trabajo previamente realizado para que éste siga funcionando a pleno rendimiento
Los ingresos pasivos no tienen porque ser pasivos para todos. Puede haber otras personas con trabajos normales haciendo el trabajo que nos permita recibir esos ingresos pasivos. La tecnología es sin duda una gran aliada que puede ahorrarnos un montón de trabajo.
El nivel de pasividad depende en muchas ocasiones de la perspectiva desde donde se mire. Los ingresos pasivos de una persona puede ser la renta activa de otra.
Ventajas de los ingresos pasivos
¿Qué beneficios tienen los ingresos pasivos para ser tan codiciados? ¿Por qué todo el mundo los desea? La respuesta es muy sencilla y se compone de tres motivos:
1.- Más dinero y menos trabajo: ¿quién quiere trabajar 40 horas a la semana toda su vida? En caso de poder elegir, yo creo que nadie. Si existe la posibilidad de ganar el mismo dinero pero trabajando la mitad, ¿quién diría que no?
Pues de eso se trata cuando buscamos conseguir ingresos pasivos: ganar dinero aunque estemos tomando el sol en la playa o de vacaciones con nuestra familia
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